EL SAGRADO MANTEL DE CORIA EN FITUR 2018.

EL SAGRADO MANTEL DE CORIA EN FITUR 2018.

El Ayuntamiento de Coria promocionará el Sagrado Mantel de la ÚItima Cena en la XXXVIII edición de la Feria Internacional de Turismo de Madrid (FITUR) que se celebrará del 17 al 21 de enero en las instalaciones de IFEMA de la capital de España.

 

Bajo el lema: “El Sagrado Mantel de Coria: Devoción, Cultura y Turismo. Reliquia Universal de la Cristiandad”, el Consistorio Cauriense, a través de la Concejalía de Turismo, presentará este próximo jueves, 18 de enero, de la mano de su Alcalde, José Manuel García Ballestero, en el Stand de Turismo de Extremadura (Pabellón 9, Stand 9C10), la puesta en desarrollo de la nueva estrategia turística municipal en cooperación con el Cabildo Catedral, derivado del auge que el turismo religioso está teniendo entre aquellos potenciales turistas que sienten, cada vez más, la necesidad espiritual de acercarse hasta aquellos destinos que hayan tenido o muestren alguna relación con la vida de Jesucristo.

 

 

 

Desde siempre, las Santas Reliquias, ese gran tesoro celosamente guardado en catedrales, iglesias y conventos como testimonios perennes del fervor de los fieles, han sido expuestas para su veneración y como reclamo de las creencias religiosas de la comunidad cristiana.  En este sentido, tanto en lo histórico, como en lo cultural y en lo espiritual, la Catedral de Coria alcanzó un dignísimo rango al acoger, en su tesoro catedralicio, un variado y rico legado de piezas de entre las que destaca el Sagrado Mantel de la Última Cena.

 

 

 

Las mismas Sagradas Escrituras nos recuerdan o conmemoran, de igual modo, la liturgia instituida la milagrosa noche del Jueves Santo, como testigo directo del insigne misterio del Sacramento de la Eucaristía, según nos describe San Lucas en el capítulo 22 versículo 15.  Una visión, a la que se han acercado también los ilustres maestros del arte, para representarla en sus geniales creaciones; lo que ha permitido mantener viva la imagen de la Sagrada Cena en el pensamiento de la sociedad cristiana a lo largo del tiempo, como es el caso de la excelente obra de pintura mural al fresco: La Última Cena” (S. XV), representada por Leonardo da Vinci en el Convento Dominico de Santa María delle Grazie de Milán.

 

 

 

Un conjunto de alhajas y reliquias, cuyo culto se prolongaría durante largos siglos (XVI-XVIII), según se desprende de la abundante documentación catedralicia conservada que da testimonio de ello, concediéndose indulgencias para aquellos fieles que visitaran las Sagradas Reliquias, y en la que se hacen referencias sobre el acuerdo de obligar, a los beneficiados, a asistir a la Santa Iglesia Catedral los primordiales días de fiesta, al objeto de honrar las Santas Reliquias entre las que se encontraban: el Sagrado Mantel, una Santa Espina de la Corona y un Lignum Crucis o fragmento de la Cruz de Cristo; motivo por el que fue declarada por la Santa Sede Pontificia la fecha del 3 de Mayo, festividad de la Santa Cruz, como día conmemorativo para la veneración de tan significantes reliquias.

 

 

 

Un otorgamiento que motivó a un inmenso número de fieles peregrinos devotos a desplazarse hasta la Ciudad de Coria, desde las más remotas partes del mundo para venerar tan insigne Sagrada Reliquia, como los 4.000 que se acercaban desde el vecino país de Portugal que, junto al resto de otros territorios de España, más los propios residentes y los de las comarcas adyacentes, congregaban en torno a 20.000 personas que se apiñaban en el atrio que precede a la entrada de la llamada Puerta del Evangelio, desde cuya tribuna lateral o balcón plateresco de las Reliquias se procedía al interminable “Besamantel” por una muchedumbre que, a manera de desfile procesional, se agolpaba en la plaza y calles colindantes de los alrededores de la Catedral de Coria.

 

 

 

Unas exposiciones que se acontecieron en el tiempo con otras espontáneas manifestaciones públicas en torno a esta sagrada tela, que se fueron sucediendo a lo largo de los siglos XVI, XVII y XVIII con motivo de distintas circunstancias, tales como brotes de plagas de peste o de langosta, la carencia prolongada de precipitaciones o temporales meteorológicos, etc..  Mas, las aglomeraciones y los alborotos ocasionados por el fervor popular provocaron, temiendo por la integridad del Sagrado Mantel, la prohibición de culto público de las Santas Reliquias tras suprimir el Obispo, Juan Álvarez de Castro, las presentaciones públicas en 1791.

 

 

 

Una costumbre, sin embargo, que cayó paulatinamente en el olvido pero que siguió atrayendo a ciertos viajeros devotos, entre los que se encontraban grandes personajes de la vida política, social y económica de nuestro país, como los llegados durante los años 60, caso de Dña. Carmen Polo de Franco, Dña. Cayetana Fitz-James Stuart, Duquesa de Alba y Marquesa de Coria, o SS. MM. los Príncipes de Asturias, D. Juan Carlos y Dña. Sofía, por aquellos entontes, entre otros.

 

 

 

Simbolismo y misterio sobre una de las piezas más preciadas e importantes de la tradición cristiana desde la antigüedad, que acabó por atraer, también, a la comunidad científica, con la finalidad de investigar y estudiar esta pieza única, caso del profesor John Jackson (Director del Turín Shroud Center de Colorado), que sostiene que el Sagrado Mantel de Coria y la Sábana Santa de Turín estuvieron presentes, conjuntamente, en la mesa de la Última Cena.

 

 

Un valor devocional, cultural y turístico en torno al Sagrado Mantel, que la Ciudad de Coria y su Catedral vuelven a mostrar al mundo, con el propósito de restablecer su antiguo esplendor dentro del calendario festivo cristiano como Reliquia Universal de la Cristiandad.

 

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